Apóyalos incondicionalmente
Cuando viven la sextorsión, los jóvenes pueden sentir miedo de meterse en problemas. Les puede preocupar avergonzar a sus padres o madres, que los suspendan en la escuela, que los juzguen sus amigos o tener problemas con las autoridades. Por desgracia, es bastante probable que el mismo abusador induzca estos miedos para mantener el control sobre ellos. Estos miedos hacen que los jóvenes callen, lo que a veces conlleva consecuencias poco deseables.
Es normal que sientas miedo y frustración, pero tus hijos(as) necesitan saber que juntos lograrán siempre superar las situaciones difÃciles. Incluso si piensas que saben que les brindarás tu apoyo, tener estas conversaciones puede marcar una gran diferencia en el momento de compartir sus experiencias contigo cuando no se sientan bien o algo malo esté pasando.